sábado, 2 de junio de 2012

Día 51 – Karon Beach y Patong Blv


Estimado lector, acomódese, póngase los lentes si es que usa, deje todo lo otro que está haciendo y concéntrese de lleno en lo que está a punto de ver y leer, porque les presentamos a continuación, Tailandia en todo su esplendor.

No quiero ir directamente al grano o plato fuerte de la jornada, además de que prefiero respetar el orden cronológico de lo acontecido como siempre hasta ahora, así que comenzamos desde la mañana.

Como siempre, tras un desayuno surtido comenzamos nuestras actividades vacacionales con uno de los fuertes de Tailandia, la playa. El hotel está a un par de cuadras de una playa conocida como Karon, por lo que pedimos toallas y caminamos hasta ahí donde nos encontramos con varios compañeros más. Alquilamos un par de sillas y sombrillas porque eran cerca de las 11 am y queríamos evitar rostizarnos.
El agua estaba divina; no estaba calma y cristalina, pero sí calentita. Mucho oleaje la hacía perfecta para barrenar olas, por lo que en seguida salí a buscar alguien que alquilara tablas de morei y por 70 pesos uruguayos conseguimos dos. ¡Que comience la diversión!

Estaba complicado entrar porque las olas nos revolcaban una y otra vez, pero esta IDEAL para usar la tabla y así lo hicimos varios de nosotros. Una y otra vez, ola tras ola estuvimos deslizándonos por la espuma casi dos horas. Como se podrán imaginar, todo esto fue entre las 11 am y la 1 pm, por lo que terminé rojo tomate. Con un ardor importante en la cara, espalda, brazos y hombros, pero no me importó nada. ¡Estuvo INCREÍBLE!

Volvimos AGOTADOS a la zona del hotel en busca de algo para comer y tomar. Los precios ya no son tan económicos como en destinos anteriores, sino que se asemejan más a los de Uruguay. Repetimos menú para variar, pizza para mí y un sándwich para Ro.

Por la tarde se nubló y al ratito comenzó a llover en forma copiosa. Aprovechamos para dormir siesta y descansar. De todos modos, queríamos aprovechar la noche con alguna actividad interesante y nos recomendaron visitar la zona conocida como Patong Beach donde está toda la movida. Más precisamente en una calle de este lugar cuyo nombre no recuerdo, donde están todos los pubs y restaurantes. Así nos dijeron. Tomamos un “tuk-tuk” que es una camionetita taxi que nos llevó hasta allá. Creo que todos esperábamos ver comercios y algo más de movimiento, pero encontramos mucho más.

Resulta que en Patong se encuentra algo así como la zona roja de Phuket, y los pubs que nos habían mencionado no son meros pubs como los de Montevideo, sino que son lugares con barras y caños sobre ellas donde bailan tailandesas con MUY poca ropa. Abundan también los travestis o “lady boys” como se los conoce acá.

El lugar en sí es la representación del machismo, siendo todo sobre mujeres, sexo, alcohol y deportes. Podes sentarte en los bares, tomar algo y ver a las chicas bailando y algún partido de fútbol o pelea de kickboxing en las pantallas gigantes.

La extensión total de la mencionada calle es de dos o tres cuadras, pero está REPLETA de turistas, los mencionados pubs y de gente en la calle que te ofrece cigarros o si no te invitan a ver lo que se llama el “ping-pong show”. Este último resulta que consiste en mujeres con la habilidad de colocar pelotas de ping pong en sus partes íntimas y luego contrayendo los músculos necesarios las expulsan intentando embocarle a un vaso. Lindo, ¿no?

No llegamos a ver dicho espectáculo porque si bien es gratis la entrada, teníamos que consumir algo a un precio disparatado. De todos modos sí entramos a uno de los pubs donde vimos a las strippers y a los típicos “viejos verdes” que no faltan en ninguna parte del mundo refregándose a las chicas y manoteando todo lo que les dejaban.

Todo esto está documentado a través de nuestra labor periodística, así que se van a perder de poco. Tendrán que esperar para ver los videos, pero pueden ir haciendo bocado con algunas fotos.

Volvimos al hotel a eso pasada la medianoche, cansados por toda la actividad del día pero asombrados por habernos encontrado con algo único e inesperado. A ver qué les parece…

No hay comentarios:

Publicar un comentario